Esta vez como que hubo fútbol

Antes o después se fue la luz

Jornada doce. Maracaibo sigue marcando distancia.

Una victoria suya en la casa del empate, sumada a la derrota de Mineros en la montaña menos pensada, más la definición del clásico de color amarillo y negro le entregan la punta.

Aragua le dijo bienvenido a Tortolero cuando la luz no quiso acompañar a Portuguesa. El que no vez luz es Monagas, estuvo ganando, estuvo perdiendo, terminó empatando.

La fecha tuvo sorpresas, varios expulsados, muchos goles, y algo que se había visto poco este año: buenos partidos.

Lo bueno siempre queda para el final (?).

Lo que pasó en las tribunas por allá se queda. Ahora, queda pensar en los juegos que vienen, que todos son finales (?) (como dice el famoso casette, que sería un cd quemado en esta modernidad).

Ahora son nueve los que pelean el campeonato. 18+4 le da 22 a la gasolina y Unión tiene 25. Del primero al quinto ya son ocho puntos y hasta el sexto son diez.

Entramos en la recta final. Recta final que cubre en este momento la Copa Sudamericana. Pero que pasará a un segundo plano con el Carabobo-Trujillanos que puede definir mucho el miércoles de la otra semana.

Bueno luego de tanta línea hueca, lo que espera el seguidor. Y no son las sanciones a los involucrados de Caracas, Valera y tantos otros huecos. Sí, los premios.

Ah, no le damos sino una mención a Ever Espinoza, por la simple razón (discriminatoria razón) de que los cinco goles los metió en segunda división.

Listo. El Gaby Miranda es para el enrachado Robinson Rentería, que ahora marca para que los suyos ganen. El Koji Seita es para Anderson Silva por acumulación y no de minutos. El Alexander Echenique, reñido esta vez, es para Renny Vega, tapa uno, se come el otro.

Por Cóndor