Fue una finalísima en serio.
Nunca en la Libertadores se habían marcados diez goles en los dos partidos finales. Desde su reinstauración (?) se jugó prórroga. Otra vez cayó un equipo de Brasil en Brasil.
Liga y Fluminense se cayeron a fútbol y goles. Si bien hubo pasajes en que uno fue superior a otro, los 210 minutos que se jugaron estuvieron para cualquiera. Los quiteños vieron como una ventaja que dos veces llegó a ser de tres goles se desvaneció y tuvo que aparecer su arquero, un viejón de nombre José Francisco Cevallos para salvar la noche.
Ecuador por fin ganó algo importante. Y cada vez quedamos menos esperando la oportunidad. Bueno, en verdad Bolivia y nosotros, nada más.
Fue una final como siempre en la Copa: Fútbol, goles, espectáculo, viveza, desorden (?), anécdotas, algún argentino atravesado y Venezuela viéndola por tele otra vez.
Por Cóndor
3 comentarios:
Viva Chávez !!!
Incluso el Bolívar de Bolivia, llegó a la final de una Sudamericana...
incluso? yo no lo diría de ese modo tan despectivo... en aquel entonces el futbol boliviano estaba mucho mas adelantado que el nuestro. el factor altura lo sabìan explotar muy bien
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