Jornada 17, aún no hay campeón.
Pero sí están los descendidos.
El guerrero y la gasolina dicen chao a la categoría que no es tan subterránea (?). Los de Maturín complicaron a Mineros sacando la última edición del clásico oriental a su favor.
Táchira trabajó para todos. Su derrota en Maracay definió el descenso y los puestos de Sudamericana. Como siempre, fue protagonista (?). El aurinegro quedó fuera de todo.
La lucha de arriba fue normalona en comparación con la concreción colista. UAM regaló (?) su partido, mientras el rojo era incapaz de despachar al vinotinto.
A esta altura también quedó claro que, así todos digan Zamora, el batacazo de la temporada fue Robinson Rentería como goleador del año. Su nombre figurará junto al de glorias como Ravelo, Chiazzaro, Dolgetta, Juancho. Quedará para el análisis si fue accidente, casualidad o infortunio.
Caracas va a Ecuador a esperar dar la vuelta olímpica vía celular (?). Y de paso jugar Libertadores. Vicente Arruda es el preludio de lo que viene en la selección, pero el tema del retirado zaguero ex Cruzeiro y sus amigos es de otro post.
Los premios. El Gaby Miranda es para los goles que valen puntos de Sinisterra. El Koji Seita es para Armúa y su facilidad para hacerse echar. El Alexander Echenique, reñido esta semana, es para los quince minutos de fama de Diamante Acosta.
Por Cóndor
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